lunes, 8 de febrero de 2016

INSPECCIÓN TÉCNICA DE EDIFICIOS (ITE)

La Inspección Técnica de Edificios (ITE) es obligatoria desde 2011 para todos los edificios con más de 30 años. Estas inspecciones tienen que pasarlas cada 10 años y es por eso que los edificios deben tener una buena salud para evitar que sea desfavorable la inspección.

Lo primero que tenemos que saber es si nuestro edificio tiene que pasar la ITE el año en curso, para ello tendremos que acercarnos al ayuntamiento de nuestro municipio y solicitar la información para ver si estamos obligados a realizar dicha inspección. En este año tienen que pasar la inspección todos los edificios del año 1985 para cumplir con la normativa.

Después tendremos que contratar los servicios de un técnico cualificado e independiente para que realice la inspección, elabore un informe y se encargue de la gestión municipal.

La inspección es, normalmente, visual en la que se comprueba las condiciones de seguridad, estabilidad y consolidación del edificio:

  • Estructura y cimentación.
  • Fachadas interiores, exteriores, medianeras y otros paramentos.
  • Cubiertas y azoteas.
  • Redes generales de fontanería y saneamiento.
  • Elementos de accesibilidad.
La ITE es el trámite que permite a los propietarios cumplir con la obligación recogida en la normativa de conservar el estado de seguridad, salubridad y ornato de su edificio. Es, como la ITV de los vehículos, una inspección obligatoria para los edificios.

En el caso de que la inspección sea desfavorable, tendrá que subsanar las deficiencias de la ITE con las obras necesarias. Un vez subsanadas las deficiencias de la inspección desfavorable, se emitirá un certificado de idoneidad y habrá que registrarlo en el ayuntamiento.

ALJEA Multiservicios, S. L. le ofrece un amplio equipo de profesionales que le realizarán la inspección y en caso de que sea desfavorable, realizará un presupuesto con las reformas a realizar en los puntos necesarios, para que la ITE sea favorable. Si quiere más información póngase en contacto al 91 815 31 93 o al correo electrónico info@aljea.com y le daremos cita para explicarle el proceso con más detenimiento.

DESRATIZACIÓN

Antes de que llegue el buen tiempo y la proliferación de roedores sea un problema para las comunidades, hay que realizar la desratización para la eliminación de ratas y ratones en las zonas comunes.

La desratización se puede realizar de dos sistemas:

  • Pasiva.
  • Activa.
La primera consta de limitar su hábitat, usando medidas defensivas que impiden a los roedores que vivan y se multipliquen en las zonas comunes (garajes, cuartos de basura, cuarto de contadores, etc.). El proceso es modificar sus condiciones ambientales con objeto de prevenir y limitar la expansión de dichas especies. Su carácter es puramente preventivo y de mantenimiento y es el que se suele usar para evitar la aparición de roedores en las zonas comunes.

La desratización activa es aquella que por métodos ofensivos, físicos, químicos y biológicos se controla la población de ratas y ratones. Este procedimiento se utiliza cuando la infestación es grande y hay que mermar la población rápidamente.

En muchas veces ocasiones hay que combinar estos dos sistemas, para conseguir éxito en el control de roedores, además es lo más recomendable cuando se trata de acciones de choque o mantenimiento.

Los métodos que usamos pueden ser: químicos, físicos, biológicos y mecánicos. Si quiere más información pagase en contacto con nosotros en el 91 815 31 93 o por correo electrónico info@aljea.com, le daremos presupuesto y solucionaremos su problema.

CLORACIÓN SALINA

Si en su comunidad están sopesando la posibilidad del cambio de tratamiento de agua en la piscina, ahora es buen momento, antes de que llegue el verano y la modificación pueda perjudicar la apertura de la instalación. Si quiere hacer un cambio en una piscina a cloración salina, a continuación le vamos a dar toda la información que pueda necesitar. ALJEA Multiservicios, S. L. está especializada en el cambio a cloración salina, solucionando los problemas que puedan surgir en cada caso.

La cloración salina es un proceso en el que la depuración se realiza por medio del cloruro sódico (sal común) y la electrólisis. La electrólisis separa el cloro del sodio, el cloro desinfecta el agua, y vuelve a combinarse con el sodio, repitiéndose el ciclo constantemente.

Las ventajas de este sistema es que la agresividad que ofrece el hipoclorito de sodio (lejía), a nuestro organismo, se ve reducida considerablemente al usar el sistema de cloración salina. Además el mantenimiento y tratamiento del agua es más económico y evitamos el peligroso almacenaje de las garrafas de cloro, ya que con muy poca cantidad de sal, se puede mantener una piscina toda la temporada.

El único inconveniente es el gasto inicial, pero las ventajas son tantas que en poco tiempo es amortizado: el mantenimiento es mucho menor que la cloración tradicional, la calidad del agua es infinitamente mejor. La piel no se reseca, el pelo no se quema ni apelmaza, los ojos no se enrojecen, no se necesita la ducha para después del baño para eliminar el cloro, la absorción del cloro por el organismo es menor, haciendo más saludable para el ser humano el baño. Además la hibernación es más fácil y económica.

Las averías en el cuerpo de la depuradora son menores, si es cierto que los primeros cloradores salinos daban muchos problemas, pero el tiempo ha hecho avanzar la tecnología siendo un sistema de depuración con pocos fallos y económico de mantener.

Y lo que es cierto es que las Comunidades de Propietarios que han sustituido la cloración tradicional por la salina están muy contentos, y recomienda el cambio a otras comunidades.

Para más información llamen al 91 815 31 93, pidan información a través de nuestra web www.aljea.com o al correo electrónico info@aljea.com, un equipo de especialista estará a su disposición para resolver sus dudas.